La visita al museo de la construcción de la
Escuela de Arquitectura Técnica ha dado el pistoletazo de salida a las clases de hoy. Después hemos subido al aula informatizada con objeto de dar forma y llenar de contenido los trabajos de investigación que cada uno de los alumnos van realizando. Entre tizas y bits analizamos los pasos que se precisan para lograr una exposición del pensamiento científico que tenga rigor, que permita avanzar en el conocimiento y restar puntos a la ambigüedad de lo que es posible. También nos adentramos en una historia científica global donde no sólo Europa es el referente sino también China en el continente asiático, los dogones en Malí, los arapahoes en América del Norte, los mayas en Centroamérica, o los motilones venezolanos y los incas peruanos en América del Sur, por citar algunos. Es importante que conozcan los distintos mosaicos de civilizaciones y como de todos ellos beben las fuentes que dibujan las fronteras del saber..
Enseñar en la pluralidad y en la globalidad es escuela de tolerancia y autocrítica, de diversidad enriquecedora, de convivencia que facilita la creación de sinergias para un mayor progreso. Cada ladrillo en el conocimiento no es importante por lo que representa en sí mismo sino por la pared a la que pertenece y que luego sostendrá una cúpula, una bóveda o una techumbre, así es cada eslabón del pensamiento científico donde hasta en las ruinas de las paredes derribadas se observa la posibilidad de volver a levantar cualquier edificio.