El vuelo del águila

La clase de ayer ha sido espectacular. Hemos visitado los campos de cultivo de la Escuela Superior de Ingenieros Agrónomos de la UPM. Aprendimos las características con que tiene que contar un invernadero para reunir las condiciones necesarias para la producción de cultivos y cómo fabricar biomasa, un combustible limpio que nos ayuda a conservar una mejor calidad medioambiental.Pero a mis alumnos y a mí lo que más nos ha gustado es el vuelo de un águila destinada a cetrería, su majestuosa planta y su capacidad para delimitar objetivos. Tal vez porque nosotros también tenemos que volar muy alto y, a la vez, saber cuándo es necesario bajar a tierra para estar con las personas que queremos y hacer lo que nos gusta. Mientras observaba el cielo me he dado cuenta de que ya no es posible que nos intenten cortar las alas porque con el águila sabemos que cuando los sueños se hacen realidad siempre habrá un espacio donde volar y una tierra donde se nos espera.

Román Zurita, director técnico de Agronómos, nos enseñó las águilas. Nuestra anfitriona fue Caren González, subdirectora de la escuela, a la derecha.